¿Alguna vez te has preguntado por qué te sientes más animado después de un buen desayuno o tras tomar tus vitaminas matutinas? No es casualidad. Al igual que un coche necesita combustible para funcionar correctamente, nuestro cuerpo y mente dependen de los nutrientes que ingerimos para mantenernos equilibrados y en pleno rendimiento. En los últimos años, hemos visto una tendencia creciente hacia el bienestar integral, destacando no solo la importancia de la salud física, sino también la mental.Los suplementos alimenticios se han convertido en aliados clave en esta búsqueda de equilibrio, ayudando a optimizar nuestras funciones fisiológicas. Desde el zinc hasta los probióticos, estos suplementos no solo mantienen el cuerpo en forma, sino que también pueden mejorar el estado de ánimo y reducir el estrés. Pero ¿cómo funcionan? ¿Y cuáles son las dosis adecuadas para aprovechar sus beneficios?
Sigue leyendo para descubrir cómo ALANUR ha traducido los avances científicos más recientes para traerte información clara y accesible, diseñada para apoyar tu bienestar mental y físico.
Suplementos clave para el bienestar mental y físico
Cuando hablamos de salud mental y física, muchas veces pensamos en terapias o medicamentos. Sin embargo, una nutrición adecuada y equilibrada puede jugar un papel crucial en la prevención y mantenimiento de ambos aspectos. Los suplementos alimenticios, utilizados de forma adecuada, aportan nutrientes que pueden ayudar a mejorar la función cognitiva, reducir el estrés y mantener la energía física. No reemplazan una dieta saludable, pero complementan aquellos nutrientes que a veces es difícil obtener en cantidades suficientes solo a través de los alimentos. A continuación te presentamos algunos de los que más evidencia científica se ha documentado recientemente:
Zinc.El zinc es un mineral esencial que contribuye a muchas funciones biológicas, incluyendo la regulación del sistema inmune y la síntesis de proteínas. También tiene un papel importante en la salud mental, ya que se ha demostrado que niveles adecuados de zinc están asociados con una mejora del estado de ánimo y una reducción de los síntomas de ansiedad. La dosis diaria recomendada para adultos es de 8-11 mg, mientras que el límite superior es de 40 mg al día para evitar efectos secundarios como náuseas.
Melatonina.La melatonina, conocida por su papel en la regulación del sueño, también ha mostrado tener beneficios sobre la salud mental, ayudando a reducir la ansiedad y mejorar la calidad del sueño, lo que es fundamental para el bienestar emocional. Se recomienda una dosis de entre 1-10 mg antes de dormir, según las necesidades individuales. Aunque no existe un límite superior claramente establecido, se sugiere no exceder los 10 mg diarios sin la supervisión de un profesional de la salud.
Omega-3. Elomega-3, presente principalmente en suplementos de aceite de pescado, es otro nutriente esencial que ha mostrado tener efectos positivos tanto en la salud mental como en la física. Sus propiedades antiinflamatorias y su impacto positivo en la función cognitiva y el estado de ánimo lo convierten en un suplemento clave para el bienestar integral. Se recomienda una ingesta diaria de 250-500 mg de EPA y DHA combinados, mientras que dosis superiores a 3 gramos al día pueden aumentar el riesgo de sangrado.
Vitamina D. La vitamina D no solo es crucial para la salud ósea, sino que también ha sido vinculada con la mejora del estado de ánimo y la reducción de síntomas de depresión. En adultos, se recomienda una ingesta diaria de 600-800 UI, y el límite superior es de 4000 UI. Sin embargo, es importante tener en cuenta que la exposición moderada al sol también puede contribuir a mantener niveles adecuados de esta vitamina.
Probióticos. Los probióticos, conocidos por su papel en la salud intestinal, también pueden tener un impacto positivo en la salud mental. Investigaciones recientes sugieren que el equilibrio adecuado de la microbiota intestinal puede influir en el estado de ánimo y la reducción de síntomas de ansiedad y depresión. Aunque no existe una RDA oficial para los probióticos, una ingesta típica varía entre 1-10 mil millones de CFU, dependiendo del tipo de probiótico y la formulación específica.
Evidencia científica: Cómo los suplementos impactan en la salud mental y física
A lo largo de los años, numerosos estudios han respaldado los beneficios fisiológicos de diversos suplementos en la salud mental y física. A continuación, te presentamos algunos ejemplos clave que demuestran cómo estos suplementos han mostrado resultados positivos en diferentes áreas de bienestar.
Uno de los suplementos más investigados por su impacto en la salud mental es el zinc, un mineral crucial para funciones biológicas que van desde la regulación del sistema inmune hasta la síntesis de proteínas. Su influencia en el bienestar emocional y cognitivo también ha sido ampliamente estudiada. En un ensayo clínico realizado en niños guatemaltecos en edad escolar, los investigadores evaluaron el impacto de la suplementación con zinc durante un período controlado. Los resultados no solo mostraron mejoras significativas en el crecimiento físico de los niños, sino que también revelaron avances en su rendimiento cognitivo y emocional. Los niños que recibieron zinc presentaron una disminución notable en los niveles de ansiedad y una mejora en su capacidad de concentración y rendimiento académico en comparación con los niños que no tomaron el suplemento. Estos efectos pueden estar vinculados a la función del zinc en la neurotransmisión y la plasticidad sináptica, aspectos fundamentales para el aprendizaje y la memoria.Además, otros estudios han señalado que la deficiencia de zinc está correlacionada con un aumento en los síntomas de depresión y ansiedad en diversas poblaciones. Este mineral participa en la modulación del eje hipotalámico-hipofisario-adrenal (HHA), una vía biológica clave en la respuesta al estrés. Por lo tanto, mantener niveles adecuados de zinc en la dieta no solo apoya el bienestar físico, sino que también ayuda a regular el estado de ánimo y a reducir los efectos negativos del estrés y la ansiedad a nivel fisiológico.
La melatonina, conocida principalmente por su función en la regulación del ciclo sueño-vigilia, también ha mostrado efectos positivos en la salud mental, especialmente en personas con ansiedad e insomnio. En un estudio reciente, adultos diagnosticados con trastornos de ansiedad que recibieron una dosis controlada de melatonina experimentaron una reducción significativa en los síntomas de ansiedad, además de mejoras en la calidad del sueño. Estos efectos fueron más pronunciados en aquellos con insomnio crónico, quienes reportaron un sueño más profundo y menos despertares nocturnos.La melatonina también parece actuar sobre el sistema nervioso central, contribuyendo a reducir el estrés mental y emocional. Su acción se vincula con la modulación del sistema GABAérgico, que inhibe la actividad neuronal y promueve un efecto calmante. Además, se ha sugerido que la melatonina puede influir en el eje hipotálamo-hipófisis-adrenal (HHA), que está relacionado con la respuesta al estrés. Estos hallazgos subrayan que la melatonina no solo mejora la calidad del descanso, sino que también ayuda a regular el estado de ánimo y reducir la ansiedad, lo que la convierte en un suplemento útil tanto para la salud mental como para el bienestar emocional.
El omega-3, conocido por sus efectos en la salud cardiovascular, también ha sido extensamente investigado por su papel en la función cognitiva y el estado de ánimo. En un estudio longitudinal realizado en adultos mayores, la suplementación con omega-3, específicamente los ácidos grasos EPA y DHA presentes en el aceite de pescado, mostró mejoras en la memoria, el aprendizaje verbal y la rapidez mental. Además, se observó una reducción en los síntomas depresivos, lo que sugiere que los omega-3 no solo mejoran la función cerebral, sino también el bienestar emocional.Este efecto puede atribuirse en parte a la capacidad del DHA para apoyar la integridad de las membranas neuronales, lo que favorece la comunicación entre las células cerebrales. El EPA, por otro lado, es conocido por su acción antiinflamatoria, ayudando a reducir la inflamación en el cerebro, lo que se ha relacionado con la aparición de trastornos del estado de ánimo. Además, los omega-3 pueden influir en la producción de serotonina, un neurotransmisor clave para la regulación del estado de ánimo, lo que refuerza su impacto positivo en la salud mental.
Los probióticos han llamado la atención no solo por sus efectos en la salud digestiva, sino también por su relación con la salud mental, gracias al llamado eje intestino-cerebro. Este eje conecta la microbiota intestinal con el cerebro, lo que significa que un equilibrio adecuado de bacterias intestinales puede influir directamente en el bienestar emocional. En un ensayo clínico controlado, se encontró que los adultos que consumieron suplementos probióticos durante 12 semanas experimentaron una disminución significativa en los síntomas de depresión y ansiedad en comparación con aquellos que recibieron un placebo. Los participantes reportaron sentirse menos estresados y con mayor estabilidad emocional.Estos resultados refuerzan la teoría de que un microbioma intestinal saludable tiene efectos directos sobre la función cerebral y el estado de ánimo. Se cree que los probióticos mejoran la producción de neurotransmisores, como la serotonina, que juegan un papel clave en la regulación del bienestar emocional. Este estudio sugiere que los probióticos pueden ser una herramienta prometedora para reducir el estrés y la ansiedad, abriendo nuevas vías para el tratamiento del malestar emocional a través de la salud digestiva.
La vitamina D ha sido ampliamente estudiada por su influencia en la salud mental, además de su papel en la salud ósea. Un estudio clínico reciente mostró que las personas con niveles bajos de vitamina D que recibieron un suplemento diario experimentaron una mejora significativa en su estado de ánimo, especialmente aquellos con síntomas leves de depresión. Este hallazgo sugiere que la vitamina D juega un papel crucial en la regulación del bienestar emocional.Se cree que la vitamina D influye en la producción de neurotransmisores clave en el cerebro, como la serotonina, que es fundamental para el control del estado de ánimo. Además, su capacidad para reducir la inflamación y modular el sistema inmunológico también podría explicar sus efectos positivos sobre la salud mental. La deficiencia de vitamina D ha sido relacionada con un mayor riesgo de desarrollar trastornos del estado de ánimo, lo que refuerza la importancia de mantener niveles adecuados de esta vitamina en la dieta o mediante la suplementación, especialmente en personas que no reciben suficiente exposición al sol.
En conclusión, los suplementos alimenticios pueden desempeñar un papel fundamental en la optimización de la salud mental y física, siempre que se utilicen de manera responsable y con un enfoque basado en evidencia. Desde el zinc hasta los probióticos, cada uno de estos suplementos ofrece beneficios fisiológicos clave que pueden mejorar el bienestar general. Mantener una dieta equilibrada, complementada con los suplementos adecuados, puede ser una herramienta poderosa para mantener cuerpo y mente en equilibrio.
Si deseas conocer más sobre cómo los suplementos pueden contribuir a tu bienestar, te invitamos a seguir explorando los estudios y evidencia científica que hemos aterrizado en este artículo.
- Caldo-Silva, A., Valente, L., Chupel, M., & Furtado, A. (2021). Effect of a 40-weeks multicomponent exercise program and branched chain amino acid supplementation on cognitive performance and physical function in older adults. Experimental Gerontology, 155, 111592.
- Ganson, K. T., Nagata, J. M. (2024). Effects of multivitamin-mineral supplementation on mental health among young adults. Journal of Adolescent Health.
- Raygan, F., Ostadmohammadi, V., Bahmani, F., &Asemi, Z. (2018). The effects of vitamin D and probiotic co-supplementation on mental health parameters and metabolic status in type 2 diabetic patients with coronary heart disease. Progress in Neuropsychopharmacology & Biological Psychiatry.
- Botha, F., et al. (2022). Protecting mental health during periods of financial stress. Social Science & Medicine, 306, 115158.
- Alateeq, D., et al. (2022). The use of dietary supplements for mental health among the Saudi population: A cross-sectional survey. Saudi Pharmaceutical Journal, 30(6), 742–749.
- Fariba, R., Vahidreza, O., Fereshteh, B., &Zatollah, A. (2018). The effects of vitamin D and probiotic co-supplementation on mental health parameters and metabolic status. Progress in Neuropsychopharmacology & Biological Psychiatry.
- Caldo-Silva, A., et al. (2021). Effect of a multicomponent exercise program and branched chain amino acids on physical and cognitive health. Experimental Gerontology, 155, 111592.
- Alateeq, M.A. Alsubaie, F.A. Alsafi et al. (2022). The use of dietary supplements for mental health among the Saudi population. Saudi Pharmaceutical Journal 30 (2022) 742–749.
- Stone, K.A., Mahoney, S.J., Paryzek, R.A., Pitts, L., & Stastny, S.N. (2022). Intermittent Blood Flow Restriction Exercise Rapidly Improves Muscular and Cardiovascular Health. Acta Astronautica.
- Zhou, S., Cheng, F., & He, J. (2024). Effects of high-quality protein supplementation on cardiovascular risk factors.
- S. Food and Drug Administration (FDA). Daily Value Recommendations for Nutrients and Supplements. FDA Website. Disponible en: https://www.fda.gov/
- World Health Organization (WHO). Nutritional Guidelines for Micronutrients. WHO Guidelines. Disponible en: https://www.who.int/
- National Institutes of Health (NIH). Dietary Supplement Fact Sheets. NIH Office of Dietary Supplements. Disponible en: https://ods.od.nih.gov/